Pon a cocinar una taza de frijoles negros en un litro de agua hasta ablandarlos.
Pica un ajo, una cebolla, dos chorizos y una libra de tocino en trozos pequeños. Fríe todos estos ingredientes en dos cucharadas de aceite y agrega pimienta. Apaga cuando este todo bien frito. Lava el arroz y colócalo en una olla grande, junto al refrito de cebolla, ajo, chorizo y tocino. Agrega los frijoles y 3 tazas del líquido donde se cocinaron los granos. Pon a cocinar a fuego lento sin moverlo, hasta que el arroz este cocido y seco. Sírvelo caliente.