Tras las movilizaciones de este martes 27 de agosto generadas por el tema Yasuní, el alcalde de Quito, Augusto Barrera, reveló la agresión de la que fue víctima el entorno del Centro Histórico y solicitó enérgicamente no provocar enfrentamientos ni desmanes en contra de la ciudad.
Al respecto señaló que no puede entender cómo alguien que dice querer la ecología y el patrimonio, grafitea y raya las paredes del sector patrimonial de la ciudad. “Creo que es posible un debate y una convivencia pacífica, pero acciones violentas y agresivas que atenten contra el patrimonio, contra las paradas de transporte público, afectando a sitios que son de valor histórico, no es el camino”, dijo.
El alcalde Barrera señaló que durante la jornada del martes se garantizó la movilización de estas personas, pese a la interrupción del Trole, pues la marcha llegó al centro de la ciudad. Sin embargo, expresó su dolor por como quedó el Centro Histórico tras los desmanes.
El funcionario aclaró que bajo su criterio la Policía Nacional estableció un cerco ‘pasivo’, no de enfrentamiento, pues en el sector había gente a favor del Gobierno y otros grupos en contra que pugnaban por llegar a la Plaza de la Independencia. “Es importante entender que es imposible que provoquemos el enfrentamiento de unos con otros; eso está fuera de cualquier lógica. Era riesgoso que los grupos se enfrenten”, expresó.