* Toma agua. El agua elimina las toxinas en el organismo.
* La sal es una enemiga porque contribuye a la retención de líquidos en el cuerpo. Trata de consumirla con moderación. Recuerda que las carnes preservadas, los quesos y algunas otras comidas preparadas como los consomés en polvo o lata tienen mucha sal.
* La fibra natural en los alimentos ayuda a que nuestros sistemas digestivos funcionen bien y eliminen sin problema todos los residuos. Come vegetales frescos, hojas verdes como la espinaca y evita las harinas y azucares refinados.
* Las grasas también contribuyen a la acumulación de toxinas. Especialmente las grasas saturadas como la margarina o manteca de cerdo.
* Ten cuidado con el abuso de las especies. Las especies en moderación son saludables pero el abuso de la pimienta, y otras especies además de irritar el estómago acumula toxinas en tu piel.