Jue. Nov 21st, 2024

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reivindicó hoy, desde los estudios DreamWorks (California), el entretenimiento como motor económico y creativo del país, alabó el trabajo de sus responsables y prometió «una jubilación segura» para la clase media.

«En la carrera global por puestos de trabajo e industrias, lo que hacemos mejor que nadie es la creatividad», afirmó Obama frente a cerca de un millar de trabajadores de la empresa en su sede de Glendale, tras haber recorrido las instalaciones acompañado por Jeffrey Katzenberg, director ejecutivo de la compañía y uno de los principales donantes a las campañas del presidente.

Barack Obama
Barack Obama

«Eso no se puede copiar. Es una de las razones que explican por qué, a pesar de los nuevos mercados y tecnologías, sigue sin haber un sitio mejor para hacer películas, televisión o música«, manifestó el mandatario, provocando el aplauso de los asistentes.

«El entretenimiento es un foco brillante de nuestra economía. El margen entre lo que podemos hacer aquí y lo que se puede hacer en otros países es enorme», agregó.

Por eso, Obama insistió en la necesidad de que esa «competitividad» se mantenga y resaltó el buen comportamiento de las exportaciones, al indicar que el país vende «más productos que nunca en el extranjero», incluidos estrenos cinematográficos, DVD’s o derechos de distribución.

En su aproximación al ciudadano a pie de calle, también recordó a los «cientos de miles» de trabajadores de la industria del entretenimiento cuya labor se realiza «detrás de las escenas» y que no siempre se ve reconocida.

«Muchos pasamos tiempo pensando en nuestras películas o series favoritas, pero no reparamos en la infraestructura y la industria que hay detrás con cientos de miles de puestos de trabajo», comentó el presidente en alusión a electricistas, carpinteros, mezcladores de sonido, maquilladores, diseñadores y animadores, entre tantos otros.

Orgullo de Estados Unidos

El mandatario se mostró orgulloso del «producto hecho en América para el resto del mundo», y comentó que en cualquier parte de la Tierra hay un niño con una camiseta de la película infantil «Madagascar» o alguien diciendo «Que la fuerza te acompañe», una frase célebre de «Star Wars«.

«Cientos de millones de personas pueden no haber puesto un pie en Estados Unidos, pero gracias a vosotros, han experimentado una pequeña parte de lo que hace especial a este país. Han aprendido algo sobre nuestros valores. Hemos dado forma a la cultura global a través de vosotros», manifestó.

Obama aprovechó para recordar la responsabilidad que tiene el sector del entretenimiento apostando por historias sobre tolerancia, diversidad y superación de adversidades, y sugirió «no glorificar» la violencia para evitar tragedias como la de la escuela primaria Sandy Hook, donde murieron hace ahora un año 26 personas, incluidos 20 niños.

Quiso dejar claro que es necesario seguir debatiendo sobre los mensajes que llegan al espectador, pero que en cualquier caso «nunca» se debe renunciar a la «libertad» de contar esas historias, haciendo alusión a la Primera Enmienda.

Más adelante en su discurso, Obama se mostró satisfecho de que la reforma sanitaria permitirá a «centenares de personas cada día» recibir seguros médicos por primera vez, y que gracias en parte a Affordable Care Act (la ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio) los precios de esos seguros «crecen al menor ritmo de los últimos 50 años».

Asimismo, prometió «una jubilación segura» para la clase media facilitando maneras más sencillas de ahorrar y así fortalecer la Seguridad Social, algo a lo que espera contribuir con la aprobación de la reforma migratoria, de manera que los trabajadores indocumentados paguen sus impuestos y se siga atrayendo al talento extranjero.

El mandatario recalcó que su máxima prioridad es que Estados Unidos siga siendo un país donde se puede «salir adelante con esfuerzo y trabajo duro».

«En Hollywood, más que en ningún otro lado, no importa tu aspecto o de dónde vienes. Puedes triunfar si así te lo propones. Esa es la esencia de este país», sostuvo un Obama que reconoció que trata de dirigir su Administración con «bondad y empatía».

«Que a mis hijas Malia y Sasha les vaya bien no es suficiente. Quiero que a vuestros hijos les vaya igual. Quiero que los hijos de Jeffrey puedan aspirar a lograr sus sueños, pero también quiero que los hijos de la persona que limpia su oficina tengan esa misma posibilidad», concluyó. EFE