Es importante. paramantener la piel firme, flexible, joven, y seguir una regla de oro que tiene los siguientes pasos:
Primer paso: No sólo limpieza significa agua y jabón. Es recomendable, el uso de limpiadores que deberán ser aplicados, para que tengan un mejor resultado, de abajo hacia arriba, en el cuello, y de adentro hacia afuera, en la cara.
Segundo paso: Tonificar es necesario, luego de abrir los poros en el proceso de limpieza. Aplica tonificadores y astringentes. Éstos, además refrescan la piel, le dan firmeza y eliminan los residuos que quedan de la aplicación de los limpiadores.
Tercer paso: Hidratar. Tanto limpiadores como tonificadores o astringentes tienen como funciones eliminar las grasas naturales segregadas por el organismo. Sin embargo, para que la piel recupere su flexibilidad, es necesario aplicar un humectante, el cual crea una capa muy fina, evita el exceso de evaporación de agua y suaviza la epidermis.
Cuarto paso: Usar mascarillas. La mascarilla facial ejerce sobre el rostro múltiples efectos como eliminar la suciedad escondida que dejaron los limpiadores, activa la circulación facial, ayuda a nutrir la piel y elimina las toxinas que deterioran la apariencia de su rostro.
El tiempo que la mascarilla debe estar aplicada varía entre 10 y 20 minutos, dependiendo de la receta y de su tipo de piel. Las mascarillas se elaboran a base de alguna sustancia obtenida de plantas o hierbas. Debe extenderse sobre la piel de su cara, pero no alrededor de los ojos, por lo que deberá protegerlos o cubrirlos con algodones humedecidos en algún aceite, como por ejemplo, el de almendras.