El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, aceptó hoy que corregirá una información difundida por él mismo sobre un altercado que mantuvo con el popular cantautor Jaime Guevara, al que en principio acusó de estar en estado etílico y drogado durante el incidente.
Según Correa, durante un recorrido en su vehículo por una de las calles de Quito, Guevara le hizo una «mala seña» con el dedo y que por ello decidió recriminarle en persona.
No obstante, el pasado sábado, en su habitual informe semanal, el mandatario indicó que el artista olía a alcohol y que, seguramente, también había ingerido drogas.
Correa, hoy, en una rueda de prensa en la ciudad portuaria de Guayaquil, aceptó que hubo un error de apreciación, pues el mismo Guevara, en las redes sociales, aclaró que es abstemio y que no consume drogas por una enfermedad que padece y por principios ideológicos.
El mandatario aceptó la aclaración, aunque se defendió al señalar que en principio, con su equipo de seguridad, pensaron que «el tipo estaba en estado etílico, olía a alcohol, balbuceaba, se tambaleaba».
«Parece que no bebe», porque Guevara padece de cisticercosis que le produce cuadros de epilepsia, aunque «no hemos mentido», pues «daba toda la impresión de aquello», de estar en estado etílico, remarcó el mandatario, tras aclarar que en el altercado «no se le tocó» al cantautor.
«Vamos a corregir esa información el próximo sábado, pero no vamos a pedir disculpas», ya que «este señor no las merece» pues «él provocó este incidente», añadió el mandatario tras afirmar que mientras esté en el poder no permitirá «que se insulte al presidente» de la República.
Correa dijo que defenderá su honra y criticó que el incidente haya sido resonado con amplitud por políticos y medios de comunicación contrarios a su gestión.
Militante de izquierda e irreverente hacia el poder, Guevara no ha descartado iniciar una demanda contra el mandatario por injurias calumniosas. EFE