Sáb. Nov 9th, 2024

La Dama de Hierro, histórica líder del Partido Conservador británico y primera ministra entre 1979 y 1990, fallece a los 87 años.

muere margaret thatcherLa ex primera ministra británica conservadora Margaret Thatcher, en el poder entre 1979 y 1990, ha fallecido este lunes a los 87 años de un ataque de apoplejía, informó su portavoz, Lord Bell.

«Con gran tristeza, Mark y Carol Thatcher han anunciado que su madre, la Baronesa Thatcher, ha fallecido pacíficamente esta mañana tras un infarto cerebral», ha declarado el portavoz, citado por SkyNews.

La llamada ‘dama de hierro’, la única mujer que llegó al puesto de primera ministra en el Reino Unido y se enfrentó a Argentina en la guerra de las Malvinas en 1982, estuvo en el poder entre 1979 y 1990. Nacida el 13 de octubre de 1925 en Grantham (norte de Inglaterra), la política tory procedía de una familia de modestos recursos.

Thatcher ganó los comicios de 1979 en momentos en que el Partido Laborista estaba debilitado y el país parecía paralizado por las huelgas y la crisis económica.

Su llegada al poder supuso una completa transformación del Reino Unido al apoyar la privatización de industrias estatales y el transporte público (trenes y autobuses); la reforma de los sindicatos, a los que prácticamente despojó de poder, la reducción de los impuestos y del gasto público y la flexibilidad laboral.

El primer ministro británico, David Cameron, ha lamentado la muerte de Margaret Thatcher. «He conocido con gran pesar la muerte de Lady Thatcher», ha señalado Cameron a través de su cuenta oficial en Twitter, @Number10gov. «Hemos perdido a una gran líder, una gran primera ministra y una gran británica», ha añadido. Cameron se encuentra en Madrid, donde se ha reunido con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Palacio de la Moncloa. El primer ministro ha cancelado su agenda -tenía previsto viajar esta tarde a París- para regresar inmediatamente a Londres.

La reina de Inglaterra, Isabel II, también ha manifestado su «tristeza» por el fallecimiento.

Para bien o para mal, Thatcher pasará a la historia como una primera ministra conservadora fundamental que transformó, y dividió, al país en los casi once años que estuvo en el Gobierno y fue la primera mujer del Reino Unido en llegar al cargo más alto del poder.

Con tesón y estilo agresivo a la hora de negociar, Thatcher se atrevió con todo, desde la casi destrucción de los sindicatos, el enfrentamiento con el IRA, la defensa de los intereses británicos frente a Europa, sus críticas a la desaparecida URSS y a un conflicto armado en 1982, cuando envió tropas al Atlántico Sur para defender las islas Malvinas de la ocupación argentina.

La fuerte voluntad y la determinación de Thatcher le valieron el nombre de la «dama de hierro», apodada así en su día por los medios soviéticos por su férrea oposición al comunismo.

Con gran capacidad para el estudio, Thatcher ingresó en un colegio secundario público de carácter selectivo y consiguió entrar en la Universidad de Oxford, donde estudió Química.

Pronto se daría cuenta de que su pasión era la política, por lo que estudió Derecho y se graduó como abogada en 1954.

El paso más importante lo daría en 1959 cuando fue elegida diputada por la circunscripción de Finchley (norte de Londres), lo que le permitió ocupar la subsecretaría de Estado de Pensiones en el Gobierno de Harold Mcmillan (1957-63). Después desempeñaría diversos cargos en su partido cuando estaba en la oposición hasta 1970.

Con la victoria del «tory» Edward Heath en 1970, Thatcher se encargó de la cartera de Educación, pero cuando los conservadores perdieron las elecciones generales en 1974, desafió ese liderazgo y, para sorpresa de muchos, salió victoriosa.

Desde entonces, su carrera al 10 de Downing Street, residencia de los primeros ministros, fue meteórica al ganar los comicios de 1979 en momentos en que el Partido Laborista estaba debilitado y el país parecía paralizado por las huelgas y la crisis económica.

Su llegada al poder supuso una completa transformación del Reino Unido al apoyar la privatización de industrias estatales y el transporte público (trenes y autobuses); la reforma de los sindicatos, a los que prácticamente despojó de poder, la reducción de los impuestos y del gasto público y la flexibilidad laboral.

Las medidas pronto consiguieron rebajar una inflación que parecía no tener freno, pero tuvieron un coste muy alto para la población británica por el aumento del número de parados.

La euforia inicial por su llegada al poder se transformó pronto en frustración, a tal punto que los sondeos presagiaban la derrota de Thatcher en las elecciones generales de 1983.

Sin embargo, la inesperada ocupación de las islas Malvinas por parte de los militares argentinos el 2 de abril de 1982 cambió el rumbo de la historia.

La victoria de los británicos en junio de ese año selló el destino, y la fama, de la «dama de hierro», que se alzó con la victoria en las generales de 1983.

Con ese triunfo vendrían los años duros de Thatcher, que no dudó en continuar con el congreso anual de su partido en Brighton (sur de Inglaterra) cuando el IRA perpetró en 1984 un atentado contra el hotel donde se celebraba o cuando se enfrentó a los mineros, a los que derrotó en 1985, después de un año de enfrentamientos por el cierre de pozos de carbón.

También marcaron los años de Thatcher su fuerte alianza con el expresidente de EEUU Ronald Reagan y su oposición al comunismo, si bien se dejó seducir por el carisma del reformador soviético Mijail Gorbachov.

Pero el declive de Thatcher llegó a finales de los 80 con su impopular «poll-tax», un impuesto municipal cuyo impago se castigaba con la negación del derecho al voto, además de su continua intransigencia sobre la integración europea.

Su caída por el controvertido impuesto no vino de la mano del votante, sino de su propio partido, que el 22 de noviembre de 1990 la castigó con una revuelta interna por su implacable determinación, la misma que la llevó al poder.

Fuente: El País

Por kochoa