Vie. Sep 20th, 2024

Familiares señalan que se prostituía y se drogaba desde hace 8 meses

El misterio sobre quién era la mujer, que fue encontrada descuartizada en la orilla del río Guayas, en Durán, terminó la mañana de ayer; luego de que la madre y hermana de la menor la reconocieran en el anfiteatro del departamento de Medicina Legal de la Policía.

La brutalmente asesinada tenía 17 años y respondía a los nombres de N. R. J. P. Sus familiares desconocen que pudo haber sucedido para que la mataran tan cruelmente. Sin embargo, reconocen que la muchacha llevaba más de ocho meses prostituyéndose y sumergida en el mundo de las drogas.

María Jiménez, hermana de la occisa, señaló que su hermana fue vista por última vez el pasado 25 de diciembre, tras haberse amanecido bailando en casa de su madre en el bloque 9 de Bastión Popular. Pero como era costumbre que se desapareciera, no se imaginaron que le podía haber sucedido algo malo.

La sospecha y posterior reconocimiento del cadáver, por parte de su progenitora, se produjo tras la difusión de la noticia en los diferentes medios de comunicación.

«No se quien pudo hacerle esto a mi hija, ahora no me sirve de nada pensar quién la mató. Solo quiero enterrarla y olvidar lo sucedido, porque esto es muy doloroso para una madre», expresó consternada y bañada en lágrimas, Aracely Bone Benítez, madre de la difunta.

 

SE PROSTITUÍA Y SE DROGABA

N. R. J. P., formaba parte de un hogar humilde. Sin embargo, según su hermana, las malas compañías hicieron de ella una ‘chica perdida’. Así la describe, al momento de contar a que se dedicaba.

«Mi hermana se prostituía y usaba drogas desde hace varios meses. El 25 cuando estábamos en casa de mi mamá me dijo que se quería morir, porque estaba embarazada y el hijo no era del marido que está preso en la Penitenciaría», indicó María.

Quien cometió el terrible crimen difícilmente será descubierto; pero las investigaciones continuarán a pesar de que la familia de la mujer no quiere saber nada más sobre lo ocurrido.

Muerte deja incógnitas

Las dudas sobre: ¿quién la mató, donde ocurrió el crimen y el por qué de tal masacre? continúan.

Según el testimonio de la hermana de N. R. J. B., la familia cree que detrás de su muerte puede encontrarse su marido, quien se encuentra detenido por robo desde hace 6 meses. La sábana militar donde estaba envuelto el cadáver descuartizado, es otra incógnita que arroja el caso. La occisa deja a una niña de un año en la orfandad. (MV)