Jue. Nov 21st, 2024

Cerca de las 10h30 de ayer, mientras miembros de la Policía patrullaban por La Vicentina, en el centro de Quito, fueron alertados desde la central para que acudan a una llamada de auxilio en una vivienda del sector.

Al llegar al lugar, los gendarmes encontraron la puerta abierta del domicilio. Se dirigieron hasta el segundo piso, en donde encontraron en una de las habitaciones, a una joven (14) en la cama y a una mujer de aproximadamente 65 años, la cual tenía a un hombre en el piso.

El sujeto que estaba bajo la fuerza de la anciana, fue identificado como Jesús David Villarroel Benavidez (22).

«La señora nos informó que estaba llamando a su nieta por teléfono. Al ver que no contestaba, se alarmó y se dirigió hasta la vivienda. Cuando llegó se encontró con la ingrata sorpresa de que un hombre estaba encima de su nieta violándola en su propia cama», manifestó el Subteniente Luis Vinueza, quien encontró a la abuela de la joven ultrajada, sosteniendo al abusador en el piso de la habitación, para que no escape y pague por su brutalidad.

Tras la interrogante de los uniformados, Jesús Villarroel, aseguró que es estudiante de tercer curso del colegio Mejía. Además, acotó, que conoce a la menor que violó, pues antes de dirigirse a su domicilio, se comunicó con su hermana, que es su ex novia.

Esta versión dada por Villarroel fue desmentida por la madre y abuela de la adolescente, quienes pusieron la denuncia, pues no tiene hermana. De igual manera, la afectada acotó que nunca había visto al violador, a diferencia de los policías que cuidan el sector, quienes confirmaron que en varias ocasiones lo vieron pasear por ahí.

MAS CASOS DE VIOLACIÓN

Desde hace varios meses, en La Vicentina se han denunciado varias violaciones. Los policías que resguardan el sector, aseguraron que van a redoblar los esfuerzos y que van a llegar hasta las últimas consecuencias para dar con el paradero de quien o quienes estén ultrajando a las mujeres que habitan en el lugar. Los gendarmes presumen que Jesús Villarroel esté tras estos abusos. ¡Salvaje..!