La mayoría de las personas han sufrido alguna vez de un repentino e incontrolado dolor muscular conocido con el nombre de calambres o espasmos. Estos pueden tener su origen en la realización de algún movimiento, la exposición al frío o el estrés. Para contrarrestar estas molestias, tome una infusión de Ginkgo biloba. Para ello, se debe hervir, por 10 minutos, tres cucharadas de ginkgo en una taza de agua. Pasado ese tiempo, retirar del fuego y beber una taza diaria.