Realiza estos ejercicios 3 veces por semana, y si puedes, acostúmbrate a hacerlos a diario. No te quitará mucho tiempo. Debes empezar con diez repeticiones e irlas aumentando hasta llegar a 20.
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Aunque no lo creas, el ejercicio que realizas lavando la ropa, es muy bueno para los brazos y el busto. Friega 20 veces la ropa con una mano, luego haz lo mismo con la otra.No es necesario que realices todos los ejercicios. Elige solo tres de ellos y pratícalos disciplinadamente y obtendrás buenos resultados.
Realiza estos ejercicios 3 veces por semana, y si puedes, acostúmbrate a hacerlos a diario. No te quitará mucho tiempo. Debes empezar con diez repeticiones e irlas aumentando hasta llegar a 20.
1.
Siéntate derecha, relaja los brazos a los lados y gesticula exageradamente como si pronunciaras la letra «x». Verás cómo tu pecho sube y baja mientras lo haces. Esto hace que los músculos se tonifiquen contra la gravedad. Este ejercicio lo puedes hacer en cualquier momento, incluso cuando estás viendo la televisión.
2.
Dobla tus brazos como si fueras a cruzarlos. Sujeta con tus manos los antebrazos, y presiona uno contra otro. Repite el procedimiento 10 veces. Cambia el cruce de los brazos y repite otras 10 veces.
3.
De pie, derecha frente a la pared, coloca tus brazos extendidos a la altura de los hombros, flexiónalos hasta que tu pecho casi toque la pared. Si puedes hacer las flexiones sobre el piso, ayudarás también a esculpir tus brazos.
4.
Acuéstate en el piso y flexiona las rodillas. Toma un par de mancuernas, o un par de botellas plásticas llenas arroz. Extiende tus brazos a los lados, en un ángulo de 90 grados. Levanta y baja los brazos, en línea recta.
5.
Coloca una cinta de un metro de largo, en el centro de un palo de escoba. Siéntate recta, toma el palo con ambas manos y extiende los brazos a la altura de los hombros. Gira el palo hacia adelante hasta que la cinta se enrrole. Realiza el mismo procedimiento hacia atrás.
6.
Estira los brazos hacia los lados. La idea es que tu cuerpo forme una letra T. Realiza movimientos circulares, hacia dentro y hacia fuera.
7.
Párate derecha y estira un brazo, lo más fuerte que puedas, intentando tocar el techo. Alterna la operación con el otro brazo.
8.
Parada, estira los brazos hacia delante, a la altura de los hombros, crúzalos a la altura de los antebrazos, formando una x. Si puedes, utiliza las mancuernas y así será más efectivo.
9.
Aunque no lo creas, el ejercicio que realizas lavando la ropa, es muy bueno para los brazos y el busto. Friega 20 veces la ropa con una mano, luego haz lo mismo con la otra.No es necesario que realices todos los ejercicios. Elige solo tres de ellos y pratícalos disciplinadamente y obtendrás buenos resultados.
Parada, estira los brazos hacia delante, a la altura de los hombros, crúzalos a la altura de los antebrazos, formando una x. Si puedes, utiliza las mancuernas y así será más efectivo. Párate derecha y estira un brazo, lo más fuerte que puedas, intentando tocar el techo. Alterna la operación con el otro brazo. Estira los brazos hacia los lados. La idea es que tu cuerpo forme una letra T. Realiza movimientos circulares, hacia dentro y hacia fuera. Coloca una cinta de un metro de largo, en el centro de un palo de escoba. Siéntate recta, toma el palo con ambas manos y extiende los brazos a la altura de los hombros. Gira el palo hacia adelante hasta que la cinta se enrrole. Realiza el mismo procedimiento hacia atrás. Acuéstate en el piso y flexiona las rodillas. Toma un par de mancuernas, o un par de botellas plásticas llenas arroz. Extiende tus brazos a los lados, en un ángulo de 90 grados. Levanta y baja los brazos, en línea recta. De pie, derecha frente a la pared, coloca tus brazos extendidos a la altura de los hombros, flexiónalos hasta que tu pecho casi toque la pared. Si puedes hacer las flexiones sobre el piso, ayudarás también a esculpir tus brazos. Dobla tus brazos como si fueras a cruzarlos. Sujeta con tus manos los antebrazos, y presiona uno contra otro. Repite el procedimiento 10 veces. Cambia el cruce de los brazos y repite otras 10 veces. Siéntate derecha, relaja los brazos a los lados y gesticula exageradamente como si pronunciaras la letra «x». Verás cómo tu pecho sube y baja mientras lo haces. Esto hace que los músculos se tonifiquen contra la gravedad. Este ejercicio lo puedes hacer en cualquier momento, incluso cuando estás viendo la televisión.