Las nuevas reformas viales que ha planificado el Municipio de Quito, en las principales vías del casco metropolitano comienzan a generar consecuencias negativas que se hacen visibles en algunos sectores del casco metropolitano.
Enormes estancamientos imposibles de transitar dificultan el recorrido normal de los conductores, y que según señalan tardan más o menos un tercio más del tiempo en tratar de llegar a su sitio de destino.
El principal punto de congestionamiento es la Avenida 10 de Agosto, que desde hace algunos días es lugar de trabajo de cuadrillas de la Empresa Metropolitana de Obras Públicas, que cambian el asfalto de la vía exclusiva del Trolebús.
Para dicho trabajo es necesario cerrar estas vías, y dirigir el tránsito por calles aledañas.
Pero esta condición no da buenos resultados, las arterias secundarias se taponan y el tiempo de recorrido es mayor.
Estos trabajos durarán por lo menos tres meses más. La ciudadanía pide caminos en la planificación del proyecto.