La cosmética del siglo XXI ha marcado nuevas tendencias de color y texturas.
El maquillaje mineral es aquel que están produciendo muchas firmas de productos estéticos en contravía de los antiguos productos basados en la utilización de químicos, colorantes artificiales y resinas de olor sintético para el mejoramiento de la apariencia del rostro de las mujeres. Algunos de los componentes básicos del maquillaje mineral son minerales y pigmentos vegetales que son absorbidos muy fáciles por la piel, sin dejar durante su utilización huellas incómodas en los pliegues de la epidermis.
Con el maquillaje mineral es posible hacer más combinaciones de colores que con el tradicional, debido a que sus resinas no están fijadas con soluciones colorantes o de mezclas de elementos insolubles, pero que no son recomendables para un maquillaje permanente, si es que es el deseo de la mujer.
En este caso, se podría definir que el maquillaje mineral es perfecto para aquellas ocasiones en que la dama necesita estar lozana todo el día mostrando un rostro radiante, pero de una apariencia muy familiar, mientras que el químico es más para aquellas ocasiones donde la elegancia y el glamour exigan un toque más recargado.