Son el complemento ideal para transformar tu estilo. Existen de todos los tamaños, colores, formas y por supuesto, precios.
Sin embargo, los zapatos no son sólo un accesorio: son el soporte de tus pies y en verdad, de todo tu cuerpo. Por ello tienen que ser lo más cómodos posible. Aquí te damos algunos tips para tener en cuenta a la hora de comprarte ese nuevo par de zapatos.
* Trata de medirte los zapatos al final del día. Para la noche, después de un día de trabajo, tus pies están cansados e hinchados, por lo que podrás sentir si tu nuevo par es cómodo.
* Mírate con los zapatos puestos en un espejo de cuerpo entero. Muchas tiendas tienen espejos que sólo muestran lo bien que tus zapatos se ven en tu pie, pero tú quieres saber cómo te hacen ver las piernas y tu cuerpo en general.
* Mídete los dos zapatos. No te conformes con ver que el zapato te queda y está bonito. Camina un poco con ellos, siéntate y párate, mueve los pies, trata de caminar. Asimismo, prueba los zapatos en el piso, sal de esa alfombra de la zapatería y desliza el zapato sobre superficies reales. Piensa bien en el uso que les darás, y si no son lo suficientemente cómodos para eso, no son los más adecuados.
* Para los tacones. Los zapatos altos alargan las piernas, aumentan la estatura y alinean el cuerpo haciendo verse más atractivo. Es por eso que las mujeres nos metemos en estos zapatos sin importar la incomodidad. Para manejar bien los tacones altos y evitar daños se necesita tener un torso fuerte. Los tacones distribuyen el peso en las plantas de los pies, por lo que puedes sentir que pesas el triple de lo normal.