Los delincuentes sorprenden cada día a los usuarios que se movilizan en los transportes públicos de la capital, llevándose sus pertenencias sin que se percaten de ello. Sin embargo, las indagaciones policiales que se han realizado para frenar los robos en el sistema de transporte municipal, han determinado nueve formas distintas de actuar de los pillos para lograr su objetivo:
La pantalla: Una persona se coloca delante de la otra impidiendo el paso, mientras que por detrás otra sustrae los objetos de valor.
Saco en el brazo: Una persona oculta su mano debajo del saco o chalina, e introduce la mano en el bolso, maletín o cartera.
Gafas rotas: Una persona provoca la caída de gafas o lentes al suelo, que se rompen, la víctima se agacha para ayudar y otra persona le sustrae la cartera.
Estilete: Una persona se coloca tras otra y corta el bolso o cartera y sustrae lo que hay en su interior.
Mujer con ropa provocativa: Seduce a las víctimas mostrando sus encantos, de este modo, su compinche aprovecha para robar.
La cartera: Una persona esconde su mano bajo una cartera grande e introduce su mano en el bolso de quien esté a su lado.
Niños y discapacitados: Los pillos también utilizan a menores de edad para cometer sus fechorías. Así como también a personas que aparentan sufrir algún tipo de discapacidad física para delinquir.(FO)
Empujones: El amontonamiento de gente es ideal para los delincuentes, pues uno empuja a la víctima y el otro aprovecha para robar lo que encuentra en la maleta o bolso.