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Miami (EE.UU.), 18 feb (EFE).- Dos de los principales grupos del exilio venezolano en Miami (EE.UU.) responsabilizaron al Gobierno del país suramericano de la vida y lo que pueda suceder al dirigente opositor Leopoldo López, quien se entregó hoy a la Policía.

Leopoldo López en el momento de su detención
Leopoldo López en el momento de su detención

«Responsabilizamos al Gobierno venezolano de la vida e integridad física de Leopoldo López, que está bajo su custodia» y «debe garantizar su seguridad», coincidieron este martes Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex) y la Mesa de la Unidad Democrática.

En declaraciones a Efe, José Antonio Colina, presidente de Veppex, advirtió que el régimen venezolano «podría enviarle (a López) a una cárcel común para no garantizar su seguridad», ya que resultaría una «enorme torpeza», por parte del Gobierno de Nicolás Maduro «torturarle como acostumbran a hacer a los presos políticos» en ese país, según dijo.

Leopoldo López, contra el que pesaba una orden de captura por los incidentes del pasado miércoles al término de una marcha que dejó tres muertos, se entregó este martes a agentes de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada).

El exalcalde del municipio caraqueño de Chacao y líder del partido Voluntad Popular se ha convertido en una de las voces más importantes de la oposición al Gobierno venezolano, junto a Henrique Capriles, quien fue candidato presidencial de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD).

Su detención «arbitraria e ilegal», en opinión de Colina, debe espolear todavía más las convocatoria de marchas pacíficas que logren que «toda la sociedad se sume al rechazo al régimen» y sirvan para «impedir que el Gobierno lo mantenga (a López) ilegalmente detenido».

«La presión en las calles del sector estudiantil y de todos los gremios venezolanos» contra el presidente Nicolás Maduro y su Gobierno «debe intensificarse», enfatizó.

Para el activista venezolano, la detención de López y la continuación de las protestas en las calles de Venezuela marcan el probable fin de Maduro y del régimen chavista.

«Si las marchas pacíficas se mantienen, a Maduro no le va a quedar otra alternativa que renunciar e irse del país», apuntó Colina, quien aseguró que el pueblo venezolano «está cansado de la corrupción, la inflación disparada, la falta de comida y el desabastecimiento».

En cuanto a si la decisión de López de entregarse a la Policía fue la más acertada, Colina no dudó en afirmar que el líder opositor «hizo bien», ya que «no le quedaba otra alternativa» al haber «asumido un compromiso y una responsabilidad» con el país en «este momento histórico».

Similar opinión expresó a Efe José Hernández, coordinador de la Mesa de la Unidad Democrática en Miami, quien resaltó que, «en este momento, todo lo que le pase a López es culpa del Gobierno, ahí no hay medias tintas».

Hernández consideró que el «coraje y la valentía» de López han quedado patentes.

«Hay que tener mucho coraje para entregarse a un Gobierno como éste que no garantiza la vida a nadie» y hacerlo en defensa del ideal de «lograr un cambio pacífico» en Venezuela, apuntó.

Hernández coincidió con Colina en que el «agudizamiento de las protestas» suponen «el principio del fin de un Gobierno, de un sistema y de Maduro».

«Esto no tiene arreglo», apostilló.

Maduro dijo este martes, horas después de entregarse López a la Policía, que el líder opositor debe responder ante la Justicia por «sus llamados a la sedición» (…) y al desconocimiento de la Constitución».

Para Horacio Medina, exgerente de la petrolera estatal venezolana PDVSA, la acción de López «nos devuelve la dignidad y el orgullo de ser venezolanos», al asumir sus compromisos de una manera «clara e inequívoca», según subrayó a Efe.

Si bien no cree que la vida de López corra peligro en estos momentos, tras su detención, Medina expresó su temor a que, al no existir Justicia en Venezuela, sino «comisarios políticos», estos últimos puedan atentar contra su vida.

Por ello, y para acabar con el régimen, resulta clave que continúen las marchas pacíficas en las calles venezolanas.

«Esa es la mejor forma de confrontar a un régimen con una concepción totalitaria del poder», concluyó Medina, secretario de la Mesa de la Unidad Democrática. EFE

Por Mauricio