El ministro coordinador de Sectores Estratégicos de Ecuador, Rafael Poveda, firmó hoy un crédito por 124 millones de dólares con el estatal Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) de Brasil, mediante el cual se financiará un proyecto hídrico en esa nación andina.
El proyecto, conocido como Daule-Vinces, permitirá «controlar inundaciones» y que el país duplique o triplique sus cosechas, dijo Poveda a Efe.
El ministro explicó que la financiación del BNDES será aplicada en un proyecto de la Secretaria Nacional del Agua de Ecuador, con el cual se persigue evitar inundaciones y controlar el nivel de los caudales y las lluvias en regiones de riesgo.
Ecuador tiene reservas de agua elevadas en la región amazónica, la zona andina y la costa, donde llueve mucho, especialmente entre los meses de diciembre y abril, indicó.
«Todavía tenemos problemas de inundaciones en algunas poblaciones y eso afecta los cultivos. En ese tipo de proyecto se crean represas y luego se manejan los caudales dependiendo de la época y de las necesidades», explicó el ministro.
El proyecto Daule-Vinces es parte de una estrategia que se lleva a cabo en una zona muy productiva y alta en la provincia de Guayas, y va a beneficiar a 170 mil hectáreas, según datos del Gobierno.
«Es básicamente un trasvase de agua: se aprovecha el agua del río y se trasvasa de un sitio a otro de la provincia. Además, se alimentan muchas afluentes naturales y se crean también ríos artificiales», explicó Poveda.
Según el ministro, «lo que se pretende es controlar inundaciones y manejar los caudales en épocas de sequía para tener agua de forma controlada y regulada durante todo el año. Esto hace que mejore la productividad de la zona, que la frontera agrícola se expanda y que también seamos más eficientes en nuestros productos».
«Eso nos va a permitir que pasemos de tener actualmente una cosecha anual, a tener dos o incluso tres al año», afirmó.
Esta es la segunda financiación del BNDES para Ecuador, tras un préstamo para un proyecto hidroeléctrico firmado en 2012, y es el primero en infraestructura de agua.
«Es parte de una estrategia de consolidar y fortalecer las relaciones con Brasil», dijo el ministro, al declarar que el Gobierno de Ecuador desea «trabajar en esa complementariedad con Brasil en esos nuevos proyectos».