Vie. Nov 22nd, 2024

Cuatro son las víctimas mortales como consecuencia de las manifestaciones en Brasil. El caos se reavivó ayer.

brasil

Dos mujeres murieron atropelladas ayer en una de las manifestaciones por mejores servicios públicos que sacuden a Brasil desde hace dos semanas, con lo que subió a cuatro el número de víctimas por las protestas, informaron fuentes oficiales.
Las dos víctimas, aún no identificadas, participaban en una protesta en una carretera en Luiziana, municipio de Goiás próximo a Brasilia, cuando el conductor de un vehículo las embistió para intentar huir del bloqueo montado en la vía por los manifestantes con neumáticos.
Las dos mujeres murieron de forma inmediata y el responsable por el atropellamiento huyó sin ofrecer ayuda a las víctimas y abandonó el auto a unos pocos kilómetros, según el boletín de la Policía de Carreteras.
Cerca de 400 personas participaban en la protesta de Luiziana, cuyo objetivo era reivindicar la legalización de viviendas construidas en un terreno invadido y mejores servicios públicos para los barrios de la periferia.
Esta es la cuarta muerte en las manifestaciones que comenzaron hace dos semanas en Brasil. El pasado jueves un joven murió atropellado en Ribeirao Preto por un conductor que igualmente quiso pasar por la barrera montada por unos manifestantes.
El viernes una barrendera pública murió víctima de un paro cardíaco tras haber inhalado gas lacrimógeno durante una manifestación en la ciudad de Belén.
Pese a que los brasileños continúan saliendo a las calles para protestar y a que las manifestaciones son apoyadas por el 75 % de la población, las movilizaciones perdieron vigor desde el jueves.

No escuchan a su presidenta

Las protestas comenzaron la semana pasada en Sao Paulo, exclusivamente contra la subida de los pasajes, pero ganaron otras reivindicaciones, como mayores inversiones en salud y en educación, y críticas contra la corrupción y los elevados gastos del Gobierno para organizar eventos como el Mundial de fútbol.
La presidenta, Dilma Rousseff, invitó a los manifestantes a dialogar y propuso un pacto por mejores servicios públicos.