Vie. Nov 22nd, 2024

La colombiana Jenny Sofía Rebollo Tuirán, identificada por las autoridades españolas como la mujer asesinada presuntamente por el experto en artes marciales Juan Carlos Aguilar, habló con su familia el pasado jueves por última vez, dijo hoy a Efe una de sus hermanas.

homicidio_1_final_1349989697Gina Rebollo Tuirán explicó por teléfono desde la ciudad de Montería, capital del departamento colombiano de Córdoba, en el norte del país, que su madre estaba preocupada «porque Jenny llamaba casi a diario y desde el jueves no lo hacía».

Además, recordó que lo último que supieron era que «iba a trabajar en un spa».

«Quizás llegaría a este gimnasio también. Uno a veces tiene amigas que la convidan aquí y allá, y así uno entra en cualquier sitio», manifestó.

La Policía de Bilbao, ciudad del norte de España, halló e identificó los restos de Rebollo Tuirán repartidos en la vivienda y el gimnasio que regenta Aguilar, responsable también de la muerte de la nigeriana Maureen Ada Otuya, delitos por los que el supuesto experto en artes marciales será enviado a prisión.

De acuerdo con las investigaciones policiales en España, ambas mujeres se dedicaban a la prostitución, pero todos los familiares de la colombiana lo han descartado al afirmar que se dedicaba al mundo de la belleza.

«Mi hermana siempre ha sido una mujer muy emprendedora, muy trabajadora, era estilista profesional, somos cuatro hermanas dedicadas a eso, pero ella fue la que empezó con la belleza», dijo Gina.

La colombiana asesinada emigró hace doce años a España, donde comenzó a trabajar como peluquera a domicilio y logró más tarde establecer su propio salón de estética, hasta que quedó embarazada del primero de sus dos hijos.

El hijo mayor vive en Colombia con la abuela, mientras que el menor vivía con ella y con su segunda pareja, de nacionalidad española.

Un juez ordenó este miércoles el ingreso en prisión de Aguilar como presunto autor de la muerte de la colombiana y la nigeriana, después de su detención el pasado domingo. EFE