Delgado fue asesinado con dos tiros a la altura del pecho cuando transitaba por la cooperativa San Francisco, ubicada en la vía a Daule, diagonal a la Penitenciaría del Litoral. Deja en la orfandad a dos menores de edad.
Quevedo, en cambio fue utilizada como escudo por César Ronquillo, quien era cliente del negocio de bebidas, que ella tenía en las calles 28 y la K, donde perdió la vida por dos balas en la espalda.