El incidente más grave fue el registrado en Santos, ciudad en el litoral del estado de Sao Paulo, en donde un accidente con una carroza de una escuela de samba integrada por hinchas del club de fútbol Santos provocó la muerte de cuatro personas por electrocución y dejó heridas a otras seis.
Otra persona murió electrocutada en la ciudad de Salvador cuando estaba en un «trío eléctrico», como son conocidos los camiones usados en carnaval por estar equipados con plataforma para orquesta y poderosos equipos de amplificación de sonido, y otras dos tiroteadas en fiestas callejeras en Río de Janeiro y Paraty.
El accidente en Santos ocurrió hacia la 1.30 hora local (3.30 GMT) de este martes durante el tradicional desfile de las escuelas de samba en el carnaval de la ciudad que le sirve de sede al mayor puerto de Latinoamérica.
En el accidente murieron tres personas que ayudaban a empujar una carroza alegórica de la Escuela de Samba Torcida Sangue Jovem (Hinchada Sangre Joven) y otra que estaba en la calle asistiendo a la operación con el vehículo.
La carroza siniestrada ya había pasado por el sambódromo, la avenida utilizada para los desfiles, y se dirigía hacia el lugar en que quedaría estacionada, cuando sus conductores perdieron el control y recostaron el aparato en un cable de alta tensión.
El choque provocó un cortocircuito y la muerte por electrocución de cuatro personas, así como un incendio que dejó a seis personas heridas.
Sangue Jovem es una escuela formada por hinchas del club Santos y la carroza incendiada, llamada «o rei da bola», estaba dedicada al «rey» del fútbol Edson Arantes do Nascimento «Pelé».
En el carnaval de la ciudad de Salvador, uno de los más populares de Brasil, un hombre murió igualmente electrocutado por un corto circuito en el trío eléctrico desde el que se presentaba la orquesta de la comparsa «Me abraza’.
La víctima sufrió una descarga eléctrica que lo lanzó a la calle cuando el vehículo pasaba por el circuito carnavalesco del barrio de Ondina en la mañana de este martes.
En Bento Ribeiro, un suburbio en Río de Janeiro, un joven de 19 años murió tiroteado en la noche del lunes en una pelea campal entre adolescentes integrantes de grupos de Clovis o bate-bolas, un atemorizador disfraz típico de carnaval que incluye un balón que provoca un fuerte estampido al ser arrojado contra el suelo.
En el mismo tiroteo otros tres jóvenes sufrieron heridas pero sin gravedad.
Y en Paraty, turística y colonial ciudad en el litoral sur del estado de Río de Janeiro, un hombre murió por dos heridas de bala en la noche del lunes en una de las fiestas callejeras del carnaval.