Senado de Paraguay destituyó a Lugo por “mala gestión”, Franco es su reemplazo. Remoción causa ola regional de repudios.
En un juicio político sumarísimo y con pocas pruebas de real consistencia, el Senado del Paraguay destituyó el viernes, 22 de junio, del cargo por “mal desempeño en sus funciones” al presidente Lugo.
El entonces mandatario fue juzgado por nueve cargos, entre ellos, el de su presunta responsabilidad en la tolerancia y asistencia a invasores ilegales de tierra y por su papel, como responsable máximo del país, en el sangriento desalojo –hace dos semanas– de una hacienda ocupada por campesinos y que tuvo un saldo de 17 muertos.
A diferencia de sus partidarios, Lugo aceptó con tranquilidad su salida. “Esta noche –dijo– salgo por la puerta más grande, por la puerta del corazón de mis compatriotas”. Durante el juicio, que había sido planteado apenas un día antes, los cinco defensores de Lugo no pudieron hacer nada en las dos horas que le dieron para contrarrestar las acusaciones.
Hora y media después asumió Franco el primer mando de Paraguay con un mensaje conciliador y de unidad. “Vengo a expresar mi voluntad irrestricta de respetar las instituciones democráticas”, dijo en su discurso.
El actual flamante mandatario también señaló que conversó con los cancilleres de Unasur, quienes criticaron los costados oscuros del juicio, y explicó que ante ellos ratificó su voluntad “irrestricta” de respetar las instituciones democráticas, el estado de derecho y la vigencia de los derechos humanos.
Asimismo, Federico Franco negó que la remoción del exmandatario hubiese sido un golpe de Estado, haciendo alusión a las declaraciones de la presidenta argentina, Cristina Kirchner: “rechazo y repudio el golpe de Estado que se acaba de consumar en Asunción”.
Condenan la destitución
Países como Brasil, Cuba, Argentina y Ecuador condenan la destitución de Lugo ya que coinciden que no fue debidamente garantizado el amplio derecho de la defensa.
Asimismo, el gobierno uruguayo habla de una crisis política en Paraguay, y pide que se convoquen nuevas elecciones “tan pronto como sea posible” en el país vecino.
El vice que nunca ocultó sus ambiciones de poder
Médico cirujano, de 49 años y padre de cuatro hijos, Federico Franco nunca ocultó sus ambiciones presidenciales. Lo dijo desde que asumió como número dos de Fernando Lugo, en el 2008. Las diferencias entre el actual presidente Franco con el ahora expresidente Lugo quedaron claras desde un comienzo, y en los casi los cuatro años de gobierno de Lugo hubo una serie de roces. Pero la llegada de Fedrico Franco al poder tiene un costado amargo: si queda a cargo del Ejecutivo hasta agosto de 2013, se cierran las puertas a su posible candidatura para las elecciones de abril.
[…] reunión, según la ministra, tuvo lugar en el Gabinete Militar de la Presidencia en la tarde del 22 de junio, cuando el Senado sometía a Lugo a juicio político por “mal desempeño de funciones”. La […]