Jue. Sep 19th, 2024

 

Apuñalaron a caramelero afuera de la estación norte del Trolebus

 

Javier Campos Pérez (38), salió de una pizzería sin pagar, porque no le dieron mostaza, y a cambio un mesero le clavó tremendo ‘matachanchos’ por la espalda, perforándole el pulmón izquierdo.

El espantoso acto de sangre, aconteció a las 17h30 del martes, en la Avenida 10 de Agosto, a pocos metros de la salida principal de la estación norte del Trolebus.

El occiso era un ciudadano peruano, que viviá en el país en calidad de refugiado junto con su esposa Karina Acevedo (31) y sus tres vástagos.

Campos habría ingresado a la pizzería ‘Pepperoni’, dispuesto a almorzar una pizza. Todo ocurría sin mayor novedad, hasta que el comensal solicitó a uno de los meseros que le proporcione un poco de mostaza para su pizza; pero en su lugar, no recibió nada y fue ignorado.

Campos empezó a alterarse, reclamando que en la pizzería nadie le hacía caso. Los gritos iban y venían y ningunos de los presentes hacían mayor cosa para que el furioso cliente se tranquilizara. De los dos meseros, uno intento calmarlo, pero tal era el enojo del fallecido, que desquitó su rabia contra el camarero. Y sin más, salió por la puerta sin haber cancelado el valor de lo que había consumido.

Los pocos comensales que se encontraban en el interior del local, prefirieron hacerse de la vista gorda y no interferir en la salvaje gresca.

Molesto por la actitud de Campos, José Tabarés Leyton, uno de los meseros del restaurante, salió tras el cliente impago, lo persiguió por el interior de la estación del Trole y fue en la calle donde sacó de su uniforme un cuchillo de cocina, con el que le atravesó el pulmón izquierdo al rabioso sujeto.

Tan contundente fue el corte, que solo fue necesaria una puñalada para terminar con la vida del ciudadano peruano, que agonizó durante varios minutos, ante la mirada estupefacta de los curiosos. La sangre le corría por el cuerpo y en la calle se veían restos de su órgano destrozado.

Varios testigos presenciales, aseguraron que la riña no pasaba a mayores, y que la reacción del asesino fue totalmente sorpresiva para todos.

Como era de esperarse, el homicida se perdió entre la multitud, pese a la presencial policial. Ese mismo día, en horas de la noche, la viuda fue acompañada por efectivos hasta el domicilio del asesino, pero su madre solo supo decir que él ya no se encontraba en el país. Por el momento, las autoridades solo han podido determinar que el autor del crimen es de nacionalidad colombiana y que laboraba por varios meses en la pizzería ‘Pepperoni’.

El fallecido tenía planeado viajar el 15 de diciembre a su país natal, a pasar la navidad con sus seres queridos. Ahora su dolida viuda irá a Perú con sus vástagos, en un viaje que no tendrá retorno.

Por: Vanesa Silva