En la Parroquia San Andrés del cantón Píllaro, provincia de Tungurahua, elementos de la fuerza pública destruyeron 26 mil plantas de amapola silvestre que se encontraban entre los cultivos de arveja.
Los operativos se los viene realizando conjuntamente con personal del Ejército, Policía Antinarcóticos, Fiscalía y la Intendencia en las provincias de Chimborazo, Bolívar, Tungurahua y Cotopaxi.
Los controles son permanentes para evitar el uso, comercialización y obtención de sustancias estupefacientes.
Los pobladores identifican como ‘mala hierba’ a este tipo de plantas y comentan que ni siquiera los animales la consumen, por lo que no hubieron detenidos.