Los representantes de los pueblos del manglar están en contra del decreto ejecutivo 1391, que si bien promueve la siembra del ecosistema, busca que quienes lo recuperen sean también aquellos que lo perjudicaron: las camaroneras. Esa norma permite a las camaroneras que están en la informalidad, regularizarse, siempre y cuando cumplan con los requisitos previamente establecidos.
La Corporación Coordinadora Nacional para la Defensa del Ecosistema Manglar del Ecuador (Ccondem) rechaza la posibilidad de que estas empresas se formalicen por lo que interpuso una querella ante la Corte Constitucional, la cual fue aceptada al trámite la semana pasada.
Líder Góngora, presidente del Ccondem, asegura que con el decreto “se vuelve lícito lo ilícito. Está prohibido por ley destruir el manglar, pero mediante este decreto se lo va a permitir”, pues asegura que la regularización de las piscinas camaroneras le ha significado, durante años, varios problemas a las comunas que viven del manglar .
“Talan las zonas reforestadas en piscinas abandonadas, se están levantando muros y se reforesta en zonas que no son adecuadas”, denuncia la Ccondem. De ahí que para el organismo, el decreto abre “la posibilidad de legalización de áreas que son bienes nacionales de uso público a los irresponsables empresarios y establece una tabla de exigua reforestación”.
El sector camaronero, a pesar de la insistencia de este medio, decidió no pronunciarse, pues indicaron que su representante, César Monge, director nacional de la Cámara de Acuicultura, se encuentra de vacaciones y los demás evitaron dar comentarios.