Internos de la cárcel de varones de Cuenca, provincia del Azuay, se amotinaron a la media noche de ayer en rechazo a una requisa hecha por la Policía y que duró hasta las cuatro de la madrugada.
Los reos gritaban que fueron maltratados al tiempo que pedían la salida del director del centro penitenciario. Como protesta quemaron periódicos y destruyeron la protección que cubría una de las celdas.
Por su parte, Mauricio Vásquez, director de ese centro reclusorio, aclaró que en ningún momento fueron maltratados.
Así mismo, los familiares de los reos se colocaron frente al centro carcelario porque tenían información de que habían varios heridos, debido a un amotinamiento, lo cual fue desmentido abiertamente por las autoridades.
El gobernador del Azuay, Humberto Cordero, señaló que el operativo ha permitido encontrar muchas evidencias.