16 feb (EFE).- El encuentro celebrado hoy en Edimburgo entre el jefe del Gobierno británico, David Cameron, y el ministro principal escocés, Alex Salmond, concluyó sin «grandes progresos» sobre cuestiones como la independencia y autonomía de Escocia.
El primer ministro conservador se reunió hoy con el independentista Salmond tras pronunciar un discurso frente al castillo de Edimburgo en el que expuso sus argumentos a favor de mantener el país «unido» y ofreció más competencias a los escoceses, en caso de que rechacen la independencia en un eventual referéndum.
Cameron tildó de «constructivo» el encuentro con el líder del Partido Nacionalista Escocés (SNP), en el que, según dijo, se abordaron «asuntos que realmente importan a los escoceses, como el estado de la economía y la necesidad de lograr que la gente vuelva a trabajar», pero admitió que no hubo progresos.
Respecto a la cuestión clave sobre la independencia escocesa, el líder tory afirmó que el intercambio con Salmond, quien aboga por la celebración de un referéndum para otoño de 2014, concluyó «sin grandes progresos» sobre la fecha del plebiscito, lo cual calificó de «frustrante».
Por su parte, el político escocés señaló que no hubo tampoco acuerdo sobre cuestiones relativas a una mayor autonomía de Escocia y le pidió a Cameron que marque un calendario concreto y detallado sobre su oferta de mayores poderes para la región.
El Reino Unido es partidario de celebrar el plebiscito impulsado por Salmond el próximo año con el fin de evitar incertidumbre, para no dañar la economía escocesa.
«Creo que necesitamos plantear una pregunta directa y simple y justa y legal a los escoceses en el momento adecuado, lo que implica formular la pregunta clara: ‘¿Queréis permanecer en el Reino Unido’ -y espero que eso sea por lo que voten los ciudadanos- o ‘¿Queréis abandonar el Reino Unido'», dijo.
Cameron no detalló, sin embargo, qué tipo de competencias ofrece al Gobierno de Escocia en caso de que los ciudadanos de esa región se muestren contrarios a la independencia en la consulta.
«Lo que estoy ofreciendo es que, si la respuesta a la pregunta es que Escocia quiere permanecer dentro del Reino Unido, entonces habrá otras opciones de ‘devolución’ sobre la mesa, que podemos debatirlas, tal y como hemos hecho en el pasado», agregó. EFE