‘La Niñera’, esta de maravilla. Es la jefa de su propia empresa y no quiere mirar atrás ni para tomar impulso. Ahora, als ventas le dan de comer.
Después de estar 15 años en la televisión, ahora la despampanante actriz esmeraldeña Paola Farias, prefiere continuar con el éxito que ha adquirido en las ventas y no desea regresar por un buen tiempo a la pantalla chica. Las ofertas han aparecido, pero ella las rechaza.
Definitivamente, la recordada ‘Cocotera’, ha demostrado ser una mujer luchadora que no se duerme en los laureles, tras su confusa salida de la desaparecida serie ‘Condominio’, que emitía TCtelevisión.
Ahora Farias se ha consolidado en el mercado como una ‘Señora empresaria’. Al parecer, los productos de nutrición y belleza le dejan más billete que la TV.
“Esta empresa vino a mi vida en el momento oportuno, Mi testimonio llegó a muchas personas y les ayudó a cumplir sus sueños”, expresó ‘la morenaza’.
Aunque fuentes cercanas a Farias manifiestan que la actriz todavía no ha podido olvidar a su ex Alejandro Kenig, ya que siempre lo llama y salen hasta comer juntitos. Por su parte, Paola afirma estar totalmente enfocada en su negocio y al bienestar de su hija, Ana Victoria.
No descarta regresar con bombos y platillos a la palestra pública, pero ahora su meta es el cine. A la también cantante se le ha metido el bichito de ser parte de algún film cinematográfico, ya que es la única faceta que le falta explorar en su carrera profesional.
Actualmente, Paola se encuentra feliz incentivando a más personas a formar parte de este emprendedor negocio.
También expone lecciones de vida para que la gente crezca económica y espiritualmente. Un nuevo pretendiente anda rondando su corazón, pero no es nada confirmado.
Paola Farias ha corroborado ser una verdadera artista, nacida para triunfar. Su acomodada posición económica, le permite darles una mano a los que más lo necesitan.
La esmeraldeña no olvida sus crudos inicios cuando estaba sumergida en la pobreza absoluta. ‘Hoy por ti, mañana por mi’, es el lema con el que humildemente se maneja.