Luego de los recientes disturbios y homicidios en Inglaterra, el gobierno de David Cameron estudia la forma de impedir a manifestantes organizarse mediante las redes sociales. Paralelamente, un parlamentario propone prohibir totalmente el uso de Blackberry en el Reino Unido.
Diario Ti: Según se informaba la semana pasada, el gobierno británico considera instaurar medidas contra las redes sociales debido a los desórdenes que afectaron recientemente a Inglaterra
.
Dando seguimiento al tema, el Primer Ministro David Cameron estudia la posibilidad de instaurar una prohibición al uso de Facebook a sospechosos de desmanes e incitación al desorden público.
Según el diario The Guardian, la Ministra del Interior, Theresa May, se reunirá con los responsables de Facebook, Twitter y Research in Motion (Blackberry) para discutir sobre las responsabilidades legales en torno a los disturbios.
El premier Cameron dijo que aunque la libertad de expresión puede ser usada en servicio del bien mediante las redes sociales, también pueden ser utilizadas al servicio del mal.
En concreto, el gobierno británico desea prohibir el acceso a Facebook, Twitter y otros medios sociales a quienes hayan incitado al desorden público y actos de violencia. Inicialmente, el gobierno intentará determinar la viabilidad técnica de la propuesta.
En un comunicado de prensa difundido por la oficina del primer ministro se indica: «Cuando la gente utiliza los medios sociales con fines violentistas nos vemos en la necesidad de actuar. Estamos cooperando con la policía, los servicios de inteligencia el sector TI para ver cómo impedir a estos sujetos comunicarse entre sí mediante sitios web y servicios online, cuando sabemos que están planeando actos de violencia, desordenes y delitos».
El gobierno de David Cameron estima que Blackberry Messenger ha desempeñado un papel clave en la organización de los disturbios. Al gobierno preocupa especialmente que la comunicación entre las unidades Blackberry está cifrada y por lo tanto difícil o imposible de interceptar por los servicios policiales.
Esta situación llevó a un parlamentario a exigir la prohibición total de Blackberry Messenger en Gran Bretaña.
La policía británica ha detenido a varias personas acusadas de haber incitado a la violencia mediante Facebook y Twitter. El gobierno ha requerido además a ambas empresas eliminar automáticamente todos las notificaciones y posts de tal índole.