Una labor de investigación que inició hace tres meses se complementó con el allanamiento de una finca en el sector Río Bravo.
Según un informe policial, en el interior de la propiedad habían equipos, instrumentos y materiales utilizados para la conversión de droga y sustancias químicas. En el laboratorio se procesaba cocaína.
Esta propiedad cuenta con estructuras de construcción mixta que supuestamente sirven para elaborar, producir, fabricar sustancias estupefacientes, en donde se puede procesar, según la Policía, de 2 a 5 toneladas de clorhidrato de cocaína. Mientras se hacía la revisión del área se encontraron 30.570 gramos de la sustancia y 2.985 gramos de base de cocaína.
Esta droga estaba embalada en 27 paquetes en forma de ladrillo, envueltos en fundas plásticas, cinta de embalaje transparente y una cubierta de caucho.
Habían siete sellos con logotipos azules, con figuras de alto relieve de un delfín, la suástica o signo nazi, manzanas, fechas opuestas y un sello con la frase ‘100 % puro’.
También en una caleta casi subterránea, estaban escondidos rifles de asalto, uno marca HK calibre 2.23 milímetros, con tres alimentadoras y 61 municiones.
Además dos fusiles marca Coltis M16A2, con 237 cartuchos calibre 2.23 m.m. Nueve alimentadoras para fusil M-16 con 237 cartuchos calibre 2.23 m.m. También los agentes encontraron un fusil Fal, calibre 7.62 milímetros.
Detienen a sujeto colombiano
En la finca fue detenido Edward Gironza, de 36 años de edad, colombiano, presunto administrador de la propiedad. Él fue llevado a una audiencia en la cual se acogió al derecho del silencio y no dio detalles del caso, pero la fiscal de Guayaquil, Fabiola Gallardo, pidió al juez que disponga la prisión preventiva, lo que fue aceptado.