Bastante polémica ha causado el rechazo de Fernando Cordero frente a la participación de la relatora de la OEA , en la realización y debate de la Ley de Comunicación.Según ciertas opiniones esto va en contra del derecho a la libre expresión. Sin embargo, es cierto que no se necesitan de opiniones foráneas para redactar una ley que regirá en nuestro país. Este error es permanente, pues siempre pensamos que lo de afuera es lo mejor. Esto sin tomar en cuenta, que los demás países, no tienen los mismos escenarios políticos, sociales y económicos que nosotros. Ahora la veeduría es importante. Los organismos internacionales tienen derecho y la obligación de vigilar estos procesos para que se eviten irregularidades. Entonces habrá que cambiar la idea (aquí y afuera) de que los grandes países tienen derecho a opinar y hacer lo que deseen en un país pequeño. Esto es parte de la soberanía y el respeto. Los derechos empiezan desde allí. Los que se oponen deberían pensar en ello. ¡Cada quien manda en su casa!