Al menos 24 personas han muerto, mientras 447 están heridas, 11 de ellas en estado de gravedad, por causa de disparos por parte de fuerzas militares israelíes, que atacaron a un grupo de manifestantes que supuestamente querían entrar a Altos del Golán, territorio ocupado por Israel desde 1967 y reclamado por palestinos.
La Cancillería de Israel ha dirigido un mensaje a la misión israelí ante la Organización de Naciones Unidas (ONU) para presentar una queja contra las autoridades sirias, acusándolas de utilizar a los manifestantes para provocar disturbios en lo que ellos llaman territorios soberanos israelíes.
Las autoridades sirias han negado estas acusaciones y pretenden también levantar una queja contra los israelíes que atacaron a manifestantes pacíficos.