Un informe entregado por representantes de la Policía Nacional, reveló que varios ciudadanos de países de Medio Oriente que fueron detenidos recientemente en Quito pertenecían a una red internacional de tráfico de personas.
La operación culminó después de realizar un seguimiento a los cabecillas de la organización que se dedicaba a “tramitar naturalizaciones y visas de trabajo”, apuntó el Comandante General de Policía, Fausto Franco.
Tras confirmar la captura de los extranjeros, Alfredo Vera, ministro del Interior, detalló que cinco detenidos pakistaníes y un etíope, fueron deportados por cuanto eran requeridos por la Interpol. Las indagaciones buscan establecer nexos extranjeros.