Joven de veintitrés años fue encontrado muerto en una calle de Píntag. Feneció después de recibir un golpe salvaje en su cráneo.
La escena era macabra, el cuerpo sin vida y completamente ensangrentado de Carlos Simba, de 23 años, fue encontrado por moradores de la comuna de El Batán, sector aledaño a Pintag, después de permanecer por alrededor de seis horas en el frío de la noche, después de ser arrojado por sus asesinos luego de haberle propinado un golpe en su cabeza.
Producto de la herida, el joven murió de contado.
Al parecer, el hoy occiso se encontraba libando en compañía de algunos amigos, cuando otro grupo de jóvenes se acercaron y empezando una riña, fomentaron el descontrol en este sector rural, provocando una batalla campal, que dejó como resultado la muerte de Simba.
“Estaba pastando a mis animales, cuando vi desde lejos un bulto. Al acercarme me di cuenta que se trataba de un hombre. Inmediatamente informe a los moradores, para que denuncien el hecho a los organismos de control y estos se acerquen para realizar el levantamiento del cadáver”, indicó Mónica Cuchán, moradora de la comuna.
La riña mortal, al parecer se suscitó a las tres de la mañana del pasado sábado. El cuerpo fue hallado en la madrugada del domingo.
“La muerte de mi hermano no puede quedar en la impunidad. No descansaremos hasta que los asesinos purguen su condena”, señaló con enojo la hermana del fallecido.
El cuerpo fue trasladado a la morgue para realizarle la autopsia de ley.