Funcionarios del Ministerio de Salud Pública clausuraron una clínica en Guayaquil, donde según versiones de familiares de una educadora, esta murió después de intentar realizarse un cambio extremo en su figura. El médico que realizó la intervención, Vicente Galarza, registra por tercera ocasión denuncias por este tipo de errores.
Hace 10 años, el galeno fue juzgado en ausencia en Estados Unidos y fue requerida su extradición. En esa ocasión siete mujeres lo acusaron de desfigurar totalmente sus rostros.
Durante el operativo de clausura, el director de salud del Guayas, Yuri Patiño pudo percatarse, que la clínica no contaba con las normas básicas de salubridad, además que en ella se suministraba a los internos medicinas caducadas. Las investigaciones continúan para determinar los culpables.