Vie. Sep 20th, 2024

El presidente Rafael Correa decretó estado de excepción por el tsunami registrado en Japón y ordenó la inmediata evacuación. Momentos de nerviosismo se vivieron en el país este fin de semana, después de que la alerta de un posible tsunami, originado en las costas japonesas se propagara desde las primeras horas del viernes. El Presidente de la República, Rafael Correa no hizo esperar su pronunciamiento y decretó el estado de excepción en todo el perfil costanero del país y en las islas Galápagos. El plan de evacuaciones, desplegó a más de 13000 miembros de las fuerzas públicas y se llevó a cabo con parcial normalidad. Zonas como la provincia de Santa Elena , fueron declaradas de mayor riesgo y se priorizó el salvataje. Miles de familias fueron evacuadas a los sitios altos  de la región costanera. A pesar de que los operativos se realizaron en orden, no  faltaron los incrédulos que se negaron a dejar sus hogares, diciendo que sólo era un pretexto para robarles sus pertenencias y que estarían preparados para cualquier eventualidad. La angustia y temor eran evidentes en varios ciudadanos que utilizaron todo tipo de transporte para el abandono obligado de sus viviendas. En Manabí, 160 personas privadas de su libertad en la cárcel de Bahía de Caráquez fueron trasladadas al centro ‘ El rodeo’ para salvaguardar sus vidas. Mientras que helicópteros de las Fuerzas Armadas y ambulancias se movilizaron  para evacuar a las personas en condiciones vulnerables. Fueron unos 1.300 discapacitados, según informó el Vicepresidente del país, Lenin Moreno. Según el Comité de Operaciones Especiales (COE), las repercusiones marítimas del terremoto de 8.9 grados, registrado en el Japón, llegarían al Ecuador a las 17h00 con olas de entre 2.45 y 2.50 metros de altura y que estarían presentes en las costas ecuatorianas por alrededor de dos horas. Las esperadas olas se presentaron a eso de las 19h00. Después de constatar que no se resgistraron mayores daños, el primer mandatario levantó el estado de excepción, con la disposición de que los evacuados vuelvan a sus casas, sin ningún temor.

Por adm