Las reservas ecológicas y los balnearios sirvieron para que los ciudadanos se distraigan en estos días, sin tener que gastar mucho.
Los distintos espacios verdes en la capital y sus alrededores fueron los sitios de mayor afluencia de personas para disfrutar de este feriado. Uno de ellos es precisamente Rumibosque, una reserva ecológica localizada al nororiente de Quito. Aqui los turistas pudieron disfurtar de las cascadas del lugar y de sus paisajes naturales. Para Néstor Paico, visitante, este espacio le permite relajarse y disfurtar de las vacaciones. A esta opinión se suma la de Marco Morales, quien vino desde la costa, y afirma que salió con su familia para poder apreciar el maravilloso panorama que ofrece ese sitio. “Uno se relaja y puede respirar el aire puro que no lo tenemos en la ciudad”, aclara Silvia Santos, una de las turistas de la reserva natural.
Por otro lado, hubo quienes decidieron pasar en familia en los parques tradicionales de Quito, como La Carolina. Allí se divirtieron jugando carnaval y haciendo deporte. Uno de los motivos por el cual escogieron este sitio, es la falta de presupuesto para viajar fuera de la ciudad, aseguraron varios ciudadanos.
Los balnearios aledaños también estuvieron abarrotados. Cerca de seis mil visitantes acudieron al Tingo, así lo confirmó Iván Acosta, supervisor de ese lugar, que normalmente no recibe a tantos bañistas.
El feriado se vivió diferente
El Teleférico de la ciudad fue otro de los sitios donde los capitalinos acudieron para divertirse con las variadas atracciones que ofrece este lugar. Según Sergio Cazes, administrador del Vulcano Park, este año se incrementó en un 20% el número de vistantes en relación al feriado del 2010, pues el clima ayudó para que las personas asistan.