Laura y Juan Solano son los dueños de ‘Cuy Express’, cuya especialidad es preparar cuyes asados, que son entregados a domicilio.
Doña Laura, como la conocen, tiene en su cocina una estructura de metal de cerca de 1,80 cm de largo por 90 cm de ancho. Está compuesta por un pequeño motor que mueve lentamente las tres barras que tienen capacidad para asar nueve cuyes.
Mientras corre por su cocina pelando papas, haciendo maíz tostado, su hijo le ayuda a picar un poco de cebolla y Juan se ocupa de poner a los cuyes a asar.
Con una sonrisa, algo tímida, Laura comenta que le fascina preparar cuyes que se venden en cajas de cartón. A cada cliente entrega tarjetas de presentación.
“El primer año fue de práctica. Conocí los criaderos, los tamaños y edades de los cuyes. Además preguntaba con qué los alimentaban, porque de eso depende el sabor de la carne. Los que comen alfalfa y otras hierbitas frescas son los mejores”, afirma Doña Laura.
Su esposo, Juan Solano, quien es jubilado, es el encargado de asarlos y de vigilar la cocción. “Esto es lo que nos entretiene y nos anima”.
VENTA A DOMICILIO
La cajita de ‘Cuy Express’ contiene un cuy, papas, lechuga, tomate, tostado, salsa de maní y ají de tostado.
La familia trabaja siempre unida para la preparación, y han conformado un grupo de entrega a domicilio, que son los encargados de llevar este manjar a la mesa de sus múltiples clientes.
Su sabor es de competencia
Doña Laura ha participado en tres festivales gastronómicos del cuy.
Sus clientes viven en los barrios de San Juan, Solanda, La Rumiñahui y en el Valle de los Chillos.
Indica que cuando las entregas son en lugares distantes al costo del cuy le agregan 1 o 2 dólares por la movilización.
Sus clientes los sugieren por la calidad del plato.