Nueve presuntos secuestradores y extorsionadores, entre los cuales está David Romo Guillén, el líder de la Iglesia Católica Tradicional, también conocida como de la Santa Muerte, fueron arrestados en Ciudad de México, informó hoy la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).
En la presentación del grupo llamado «El Aztlán», Romo reprochó la captura, que se produjo entre el 18 y el 20 de diciembre, pero no trascendió hasta hoy, dijo que ésta tenía fines políticos y anunció que seguirán con la construcción del templo que tienen en el nordeste de la capital.
En un comunicado la PGJDF informó de «la liberación de un matrimonio de adultos mayores secuestrados en la delegación Magdalena Contreras», en el sudeste de la capital, «a mediados del mes pasado, y la desarticulación de la banda que consumó el plagio» el pasado 14 de diciembre.
Aquel día «los probables secuestradores irrumpieron y se llevaron consigo joyas, dinero en efectivo y un vehículo» y dejaron atada a una empleada doméstica.
«Los agraviados fueron liberados al día siguiente, previo pago de rescate, en depósito bancario y en especie, y luego de obligar al varón plagiado a realizar transferencia bancaria a cuenta de uno de los detenidos», señala el comunicado.
Ocho de las nueve personas fueron presentadas a la prensa, mientras que la última, una menor de 17 años, no compareció ante los medios
Estos fueron identificados como David Romo Guillén, de 42 años; Claudia Ivonne Cortés Navarro, de 40; Adriana Salomé Gallegos, de 46; Víctor Antonio Montes de Oca, de 48; Rafael Fernández Garnica, de 29; Ismael Ramírez Brito, de 30; Luis Alberto Martínez, de 20; y Karla Meribett Morales Delgado, de edad no especificada.
«Las nueve personas capturadas (…) se hacían pasar como integrantes del grupo delictivo de ‘Los Zetas’. Además, se obtuvo la muestra de voz de un reo de la penitenciaria de Santa Martha Acatitla señalado de participar en el ilícito», agregó la Fiscalía local.
A los presuntos delincuentes se les acusa, además de secuestro, de pagar «por usar cuatro cuentas bancarias para recibir depósitos del rescate, transferirlos y cobrarlos», de «robar automóviles, alhajas, dinero en efectivo y documentos de los afectados», cuyas identidades no han trascendido.
Además se les vincula con otros casos, entre ellos «una extorsión agravada cometida contra un diputado federal», y con otro secuestro del contable de una empresa «cuya casa fue saqueada y el profesionista extorsionado durante dos meses».
Fuentes de la Iglesia Católica Tradicional confirmaron el arresto de su líder, pero no quisieron dar más detalles sobre el caso.
El templo que mantiene el culto en el barrio capitalino de Tepito -considerado centro del contrabando y peligroso para el foráneo-, donde Romo oficiaba misas, permanece cerrado. Las imágenes religiosas de las vitrinas de las fachada han sido retiradas.
La Iglesia de la Santa Muerte, que dice tener 5 millones de fieles en el mundo, tiene su principal templo en el centro de la capital mexicana, donde se adora la imagen de una mujer de tez blanca, rasgos finos y larga cabellera, también representada como un esqueleto con guadaña.
Este culto ha sido vinculado con delincuentes y narcotraficantes, pero sus dirigentes han rechazado ese señalamiento. Al parecer consta de diversas ramas, algunas de ellas enfrentadas entre sí. EFE