Faltan cinco días para que culmine el año, y las calles de nuestra ciudad son escenario de una muestra pintoresca de monigotes.
Una de las tradiciones más populares en nuestro país, es la quema de monigotes, justo en el momento que concluye el año.
Una señal que simboliza el tiempo que se ha consumido, y que augura a través del calor que emana el fuego que se desprende del monigote, nuestras ilusiones y buenos deseos.
Conociendo esta realidad cientos de comerciantes, salen a las calles de las principales ciudades del país, para ofertar estas figura creadas con diversos tipos de materiales.
Representando a diversos personajes del ámbito musical, político y farandulero del país y del mundo, estos muñecos creados con materiales tan diversos como papel, aserrín, cartón y espuma, tienen un costo que oscila entre diez dólares, o unos con máxima complejidad que pueden alcanzar un valor de cuatrocientos dólares.
Para este año, sin duda uno de los personajes más representado en estos singulares muñecos será nuestro Presidente Rafael Correa, sin dejar de lado al siempre recordado ‘Pulpo Paul’ o algunos más críticos con la figura de Chavéz o de Barack Obama, Presidente estadounidense.
La oferta es variada, y asequible para todos los bolsillos. Es una costumbre que alegrará la última noche del año 2010.