Con las lluvias que caen sobre Quito, las calles y avenidas presentan en diversos grados los daños que estas han generado.
El problema de la vialidad en nuestra ciudad cada día se hace más evidente.
Las calles se enlutan como resultado del mal estado de la calzada. Este fue el caso del fatal accidente acontecido el domingo, en el sector de Tumbaco, cuando un bus de la cooperativa Flota Imbabura, después de que estallara su llanta en un bache de la vía, perdiera el control y se precipitara por el puente hacia el río Machángara.
Según datos preliminares el mal estado de la calzada, y de la velocidad del autobús provocaron el percance.
El saldo de este accidente fue 2 personas muertas.
Familiares de los fallecidos pedían respuestas al Cabildo, ante los problemas existentes en esa arteria, que conecta dos parroquias del norte de la capital.
Moradores del sector pedían a los organismos de control, recuperar algunos tramos de esa transitada vía.
“Pagamos peajes, es un compromiso de la empresa encargada mantener las avenidas y carreteras en buen estado y de esta manera evitar este tipo de muertes”, señaló Luis Tapia, morador del Valle de Tumbaco.
La promesa del Municipio es actuar en la brevedad posible en la regeneración de la malla vial de la urbe, pero los días pasan y las obras no se concluyen. Las lluvias en la capital estarán presentes hasta mediados de enero.
La Av. Occidental es un río
Durante los días con mayor cantidad de lluvias que caen en la ciudad, una de las vías que más problemas presenta es la Av Occidental. Al no tener un sistema de drenaje, se convierte en un río. Los conductores deben manejar con precaución, y según la Policía Nacional, cada semana ocurren tres accidentes por este defecto de construcción.