Agentes policiales capturaron a 15 sicarios del cártel de las drogas de Los Zetas que actuaban en el central estado mexicano de Guanajuato, donde hicieron desaparecer en ácidos al menos dos de sus víctimas, informó hoy una fuente oficial.
La Fiscalía de Guanajuato informó en un comunicado de que los detenidos estaban relacionados con el secuestro, a principios de este mes, de un agricultor, a quien asesinaron con una sobredosis de somníferos y cuyo cuerpo disolvieron en ácidos.
No obstante, continuaron negociando con la familia el pago del rescate. Alertados sobre este hecho la Unidad Especializada en el Combate al Secuestro y el Grupo Especial de Reacción e Intervención detuvieron a un delincuente que se presentó a recoger el dinero del rescate.
Este hombre, identificado como Omar Israel Romero Sánchez y quien trabajó para la Policía Federal, reveló detalles de la banda, cuyos integrantes fueron también detenidos.
Esta célula delictiva operaba en los municipios de Valle de Santiago, Cortazar, Salamanca y Celaya (Guanajuato) y en los estados centrales de Querétaro, Hidalgo y Puebla.
La banda confesó a la policía haber participado en al menos otros cuatro secuestros, y que en tres de ellos también asesinaron a sus víctimas.
La policía localizó dos casas en la ciudad de Salamanca, que eran utilizadas por la banda criminal para ocultar a sus víctimas.
En la comunidad de Crespo, perteneciente al municipio de Celaya, los agentes encontraron otra residencia de este grupo delictivo donde había filmado un vídeo con una de las víctimas para presionar a la familia del secuestrado.
También hallaron una fosa en la que los delincuentes vaciaron los restos de una víctima a la que disolvieron en ácidos y luego le prendieron fuego. EFE