La policía de Honduras y la oficina antidrogas de Estados Unidos (DEA) desmantelaron un campamento de narcotraficantes en la región Caribe del país y decomisaron casi 500 kilos de cocaína.
El operativo conjunto se realizó la noche del miércoles en la provincia de Gracias a Dios, fronteriza con Nicaragua y a unos 600 kilómetros al noreste de la capital, informó el ministro de Seguridad, Oscar Álvarez. “Esta acción destaca la lucha frontal que libramos en Honduras contra el narcotráfico’’, dijo Álvarez. Informó que hubo un intercambio de disparos, pero los delincuentes huyeron después ante el avance policial. No hay detenidos.
El ministro agregó que la policía quemó en el campamento tres lanchas rápidas con motores fuera de borda y otros vehículos que estaban estacionados en el lugar con el propósito de que no fuesen otra vez usados por los narcos. Las autoridades descubrieron 16 fardos conteniendo unos 30 kilos de cocaína cada uno. Álvarez señaló que aviones y helicópteros militares buscan en la zona a los fugitivos.
Mantienen acuerdo antidrogas
Desde hace 10 años, EE.UU y Honduras suscribieron un acuerdo antidrogas que permite acciones combinadas en la que los narcotraficantes detenidos en Honduras puedan ser juzgados en los tribunales y encarcelados en ese país. Alrededor de 100 toneladas de cocaína pasan cada año por el territorio hondureño procedente de Colombia y con destino a Estados Unidos.