Para vivir un romance con mucho respeto y complicidad, es importante que puedas manejar de manera inteligente cada paso que te puede llevar a la formalidad.
No dejes de lado la paciencia y actúa con perseverancia. El amor es una flor que se debe regar cada día, con gotas de compromiso y fidelidad. Si estas buscando aún a tu príncipe azul, desilusiónate, pues no existe.
* Ama a ese ser imperfecto, que tienes a tu lado. Y reconoce sus aciertos en tu caminar diario. El amar todo lo puede y todo lo soporta, pero debes entender que esto no significa convertirse en la alfombra de esa persona. Delimita los espacios que tu crees son necesarios para tener los asuntos de tu vida totalmente controlados. Ten salidas en pareja por lo menos dos veces a la semana a lugares que los enamore y les permita comunicarse de forma directa. Planifica reuniones con tus amigos y proyectate con planes a futuro. Consolida una relación con anhelos que cuente con la bendición de Dios.