¿Existe la verdadera amistad entre hombre y mujer? Es la eterna pregunta sin respuesta única. Suponemos que sí. Entonces, si compartes con tu mejor amigo, pasiones comunes, intereses, vivencias, confesiones íntimas, ¿por qué no también la cama?. Si él te resulta atractivo, ¿no es lógico que en algún momento te puedas sentir atraído por él?. No hay una regla escrita que determine los límites de la amistad, tácitamente se entiende que en la amistad el sexo está negado, porque acaba saliendo herida.
Pero como el roce hace el cariño y a pesar de repetir como un mantra ‘sólo somos amigos’, de repente un día cruzas la delgada línea y te despiertas en su cama. Entonces te invade esa sensación extraña de vergüenza e incomodidad por haber mostrado tu yo más íntimo. ¿Y ahora? Pueden pasar dos cosas, que la experiencia haya sido tan mala que acabe en anécdota o que vaya tan bien que decidas seguir con esta historia de amistad y sexo.
