Sáb. Nov 23rd, 2024

La selección española escribe en Sudáfrica 2010 la página más brillante de su historia al proclamarse por primera vez campeona del mundo al derrotar a Holanda en la final (1-0) con un gol del mago Andrés Iniesta.
El equipo de Vicente del Bosque, que llegaba con la vitola de campeona de Europa en 2008 y como uno de los grandes favoritos, acabó cumpliendo los pronósticos merced a un gol en la prórroga de la final, disputada en el Soccer City, de Andrés Iniesta.
España fue mejor, sin discusión. Pudo haber ganado antes, mucho antes, pero también podía haber perdido si no surge, de nuevo, su gran capitán, Iker Casillas, para amargarle a su ex compañero Arjen Robben.
España asumió de salida su rol dominador. Llevó las riendas, quizá hasta más de lo esperado ante una Holanda que prácticamente no quiso o no pudo jugar, porque la presión de los pupilos de Del Bosque también se lo impidió.
Lo más extraño fue que el cuadro ‘oranje’ se dedicó a destruir de manera exagerada, hasta de forma excesivamente brusca para jugadores que se caracterizan por su calidad. Pero Holanda consiguió lo que quería. Frenar el juego español. El primer cuarto de hora fue alentador para la ‘Roja’, que mandó con autoridad y tuvo, en doce minutos, tres claras ocasiones para abrir el marcador, dos de Sergio Ramos y una de Villa.
A cuatro minutos del final de la prórroga, Holanda ya se dedicó a esperar los penaltis con más claridad que hasta entonces, pero ahí surgió, inconmensurable, Iniesta, que había sido castigado por infinidad de faltas, para, como hizo con el Barcelona en la Liga de Campeones, dar la mayor alegría de la historia al fútbol español. EFE
COMPARTEN EL LIDERATO

El Mundial acabó con 145 goles, dos menos que el disputado en 2006 en Alemania, donde se marcaron 147 y con cinco futbolistas empatados a cinco tantos como máximos goleadores del torneo.
Esta lista la integran David Villa (España), Diego Forlán (Uruguay), Thomas Mueller (Alemania) y Wesley Sneijder (Holanda).
La media de goles en este Mundial fue de 2,29 goles por encuentro, frente a los 2,30 del anterior y se encuentra entre las más bajas de la historia de la Copa del Mundo, que tiene un promedio en sus dieciocho ediciones anteriores de 2,91 goles por encuentro.

Por ccarrera