María Carolina. 26 años. Soy una chica joven, con muchas ilusiones de salir adelante y tener un futuro lleno de éxito. Todo en mi vida esta dentro de la normalidad, excepto mi espacio íntimo. Acabé una relación de muchos años hace un mes. Creo y me mantengo en la idea, de que dar por terminado esa etapa en mi vida, fue lo mejor. Me siento sin duda más tranquila, no tengo que preocuparme por mantener contento a una segunda persona más que a mi. Él me fue infiel con una amiga muy cercana, perdoné su desliz, pero el día que los volví a ver juntos entendí que él simplemente no me amaba. Terminé de raíz y no he tenido contacto con nada que tenga relación a él. Pero, a pesar de mi tranquilidad al no estar atormentada por sus salidas nocturnas, por su falta de amor, me hace falta su compañía, sus besos, los momentos bellos que viviamos. Pero lo que siento, sé que es pasajero. Espero algún día poder ser feliz sinceramente.
Mi Querida María Carolina:
Toda herida se cura con el tiempo. No te desesperes, ten calma y fe.
Tu Amiga Karina