El sacrificio unido a la paciencia son virtudes que están cerca de las personas para desarrollarlas en pos de lograr sus objetivos.
Es un enunciado que solo se lo puede llegar a comprender cuando se deja de lado un sueño para seguir uno más importante, es la situación actual en la que se encuentra Mateo Fernández Robalino con tan solo 17 años de edad, quien ha tenido el orgullo y privilegio de representar al país en competencias internacionales de karting como el Mundial de Dubai y Portugal en los cuales tuvo excelentes actuaciones.
A nivel nacional también ha ganado trofeos en las categorías Junior y Senior, pero que pasa cuando existe otro sueño que seguir. Dice Mateo “Hace poco me separé de la faceta de kartista para dedicar todo mi tiempo y esfuerzo a mis estudios del sexto curso en el Colegio Alemán, con la ambición de graduarme de bachiller y tener el pase para seguir en la Universidad, posiblemente Medicina”, sentenció.
La decisión la tomé yo y la transmití a mis padres: Angel y Myriam quienes me apoyaron en mi decisión. Claro que me sigue gustando el karting y el automovilismo en general, pero lo prioritario es estudiar. He charlado con otros chicos y la verdad es que cuesta un montón dar este paso. Ojalá en el futuro siga sintiendo esa pasión que la he vivido por competir. Llegar a la meta es siempre una felicidad y la que quiero cruzarla es en los estudios”
Sin duda es una dura decisión que se la debe tomar, muchos de nosotros hemos pasado por la misma situación en algún momento de nuestra vida y nos sentimos identificados. Un sueño a seguir o un camino eficaz de vida.