Megan Young, de 23 años, se impuso ante Francia, Ghana y Brasil en la ceremonia realizada en Bali. Estudia cine y le encantan los libros de Harry Potter.
Megan Young, Miss Filipinas, fue coronada este sábado Miss Mundo 2013 en la final celebrada en la isla indonesia de Bali, que contó con fuertes medidas de seguridad debido a las protestas de musulmanes contra este certamen en las últimas semanas.
Megan Young, de 23 años, se impuso ante otras cinco finalistas, entre ellas la de Francia, que quedó segunda, la de Ghana, tercera, y la candidata de Brasil, en una gala retransmitida por televisión en más de 180 países, comprobó un periodista de la AFP.
Young, nacida en Estados Unidos y residente en Filipinas desde los 10 años, prometió entre lágrimas «ser la mejor Miss Mundo» tras una final en la que participaron 129 misses. Su país ya fue segundo el año pasado.
La joven estudia cine, ha sido presentadora de televisión, quiere ser realizadora, se considera ambiciosa y le encantan los libros de Harry Potter, según la página web de Miss Mundo.
En las últimas semanas, las participantes tuvieron que pasar una serie de pruebas como un desfile playero, que este añocambió el tradicional bikini por pareos para intentar no ofender a los opositores al concurso, o un cuestionario, todo ello supervisado por los jueces.
La decisión de celebrar la final de Miss Mundo por primera vez en Indonesia, el país con más musulmanes del mundo, levantó fuertes protestas en el país, por lo que el certamen se celebraba con medidas de seguridad reforzadas en el balneario de Nusa Dua (sur de la isla de Bali).
El grupo radical Frente de Defensores del Islam (FPI) prometió manifestarse el sábado en las inmediaciones del centro de congresos donde se celebraba el concurso, pero al final se limitó a organizar una oración masiva en una mezquita cerca de Yakarta para expresar su oposición.
«Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para impedir la celebración de Miss Mundo», prometió hace unos días Haidar Al-Hamid, jefe del FPI.
Más de 600 policías fueron desplegados para vigilar este enclave de hoteles de lujo, además de un impresionante dispositivo de fuerzas antidisturbios, cañones de agua y perros policías, según el portavoz de la policía nacional, Ronny Sompie.
Las protestas de las últimas semanas obligaron al gobierno a ordenar que la final se trasladara de Yakarta a Bali, donde en 2002 tuvieron lugar los peores atentados que ha sufrido Indonesia, con 202 muertos.
Esta isla paradisíaca es la única región de Indonesia con una población mayoritariamente hinduista y no musulmana, como el resto del país. Habituada a los turistas occidentales que se exhiben medio desnudos en sus playas de arena fina, Bali no se escandaliza con las modelos ligeras de ropa.
Sin embargo, ni el cambio de lugar del concurso ni la promesa de los organizadores de renunciar al desfile en bañador bastaron para calmar a los radicales.
Las embajadas de Gran Bretaña, Estados Unidos y Australia habían advertido del peligro de posibles «atentados» contra Miss Mundo, aunque la policía local minimizó el peligro.
Sin embargo, la oposición islamista a Miss Mundo no parece ser mayoritaria en Indonesia, donde se profesa un islam moderado.
Pero el rechazo al concurso llevó a organizar en el país uno alternativo, las «Miss Musulmanas», el 18 de septiembre, que ganó una joven nigeriana tras una serie de pruebas como recitar el Corán, desfilar con velo y sesiones de rezos.
El certamen Miss Mundo, que el año pasado se celebró en China, país que ganó el título de la mano de Yu Wenxia, ya ha provocado otras polémicas en el pasado.
En 2002 fue transferido de Nigeria al Reino Unido después de la muerte de 200 personas en enfrentamientos entre musulmanes y cristianos. Un artículo publicado en la prensa según el cual el profeta Mahoma hubiera elegido una mujer entre las candidatas desencadenó la violencia.
Este concurso de origen británico fue creado en 1951. En esa época se llamaba Concurso Bikini. Compite con Miss Universo, organizado por Donald Trump.
Fuente: InfoBae