El Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP) se encargó de la tarea de restitución del elemento faltante en el monumento a Benalcázar, que comprendió la ejecución de varias actividades como: limpieza, retiro de las rebabas, nivelación de los desfases que quedaron como consecuencia del desprendimiento de la espada. ensamble y suelda de la hoja de la espada que fue asegurada con suelda especial de bronce, y finalmente la pulida y recuperación del color de la escultura metálica.